Juez federal bloquea plan de Marco Rubio para reducir la plantilla del Departamento de Estado
Washington, D.C. – Un juez federal en San Francisco ha bloqueado el plan del secretario de Estado Marco Rubio para reducir la plantilla del Departamento de Estado, tras determinar que violaba una orden judicial emitida el mes pasado. El fallo, anunciado el 14 de junio de 2025, frena los esfuerzos de Rubio por reducir el personal del departamento, lo que ha generado un intenso debate sobre la posible extralimitación de funciones administrativas.
Rubio, quien también desempeña funciones como asesor de Seguridad Nacional interino, archivero de los Estados Unidos y administrador de USAID, ha sido objeto de escrutinio por suspender a más de 100 empleados del Consejo de Seguridad Nacional como parte de una reorganización, según reportes de CNN. Sus seguidores argumentan que estos cambios son necesarios para mejorar la eficiencia de la administración pública, mientras que los críticos advierten que ponen en riesgo las operaciones de seguridad nacional.
El plan de Rubio, presentado inicialmente en abril, contemplaba la eliminación de más de 3,400 puestos de trabajo y la consolidación o cierre de más de 300 oficinas y dependencias, lo que representaría una reducción de alrededor del 18% de la plantilla doméstica del Departamento de Estado. Las áreas más afectadas incluyen la división de Asistencia Extranjera y Asuntos Humanitarios, donde se prevé un recorte del 69% del personal, y la división de Crecimiento Económico, Energía y Medio Ambiente, con una reducción del 42%. Las operaciones de pasaportes y visas, así como el personal de seguridad diplomática, quedan exentas de los despidos.
Además de la polémica por los recortes, Rubio ha suscitado controversia por la revocación de visas a estudiantes chinos vinculados al Partido Comunista de China. Algunos aplauden la medida como una postura firme en materia de seguridad nacional, mientras que grupos de defensa de los inmigrantes la critican como excesivamente punitiva. Asimismo, ha crecido el debate sobre el viraje político de Rubio, con acusaciones de que ha abandonado sus raíces cubanoamericanas y posiciones moderadas para alinearse con la agenda del presidente Trump, especialmente en temas de inmigración y política exterior.
La reorganización propuesta por Rubio también implica la eliminación de oficinas clave, como la encargada de la reubicación de afganos que colaboraron con el ejército estadounidense y la fusión de funciones relacionadas con refugiados y derechos humanos en nuevas dependencias centradas en la migración. El secretario de Estado ha justificado los cambios como necesarios para modernizar la diplomacia estadounidense y eliminar la duplicidad de funciones, pero la medida ha sido criticada por su impacto en la promoción de la democracia y los derechos humanos a nivel internacional.
El bloqueo judicial supone un revés significativo para la administración Trump y deja en suspenso uno de los mayores esfuerzos de reorganización del Departamento de Estado en décadas.