Bruce Springsteen desafía a Trump en medio de controversia por su apoyo a Kamala Harris
La polémica entre Bruce Springsteen y el presidente Donald Trump ha alcanzado nuevos niveles de tensión en los últimos días, tras una serie de declaraciones cruzadas y la reciente exigencia de Trump de investigar los apoyos de celebridades a la campaña de Kamala Harris.
Acusaciones y amenazas desde la Casa Blanca
Todo comenzó cuando, durante el arranque de su gira europea "Land of Hope and Dreams" en Manchester, Inglaterra, Springsteen arremetió contra la administración Trump, calificándola de "corrupta, incompetente y traidora". El artista, conocido por su activismo político, llamó a sus seguidores a alzar la voz contra el autoritarismo y defender la democracia: “Mi América, la América sobre la que he escrito durante años como símbolo de esperanza y libertad, está actualmente en manos de una administración corrupta, incompetente y traidora”.
Trump no tardó en responder desde su red Truth Social, lanzando insultos personales y cuestionando el patriotismo de Springsteen. El presidente lo calificó de "ciruela seca", "sobrevalorado" y "tonto como una roca", y sugirió que debería "mantener la boca cerrada hasta regresar al país", una frase que muchos interpretaron como una amenaza velada.
Investigación por apoyos a Harris
El conflicto escaló cuando Trump anunció públicamente que solicitará una investigación sobre los supuestos pagos ilegales a celebridades, incluyendo a Springsteen, Beyoncé, Oprah Winfrey y Bono, por sus respaldos a Kamala Harris durante la campaña presidencial de 2024. Trump alegó que estos apoyos fueron parte de una estrategia "costosa y desesperada" para inflar artificialmente la popularidad de Harris, y los calificó de "ilegales" y "corruptos".
En sus publicaciones, Trump cuestionó: “¿Cuánto le pagó Kamala Harris a Bruce Springsteen por su decepcionante actuación durante su campaña presidencial? ¿Por qué aceptó ese pago si es tan partidario suyo? ¿No es eso una violación significativa y ilegal?”.
Springsteen no se detiene y recibe apoyo
Lejos de amedrentarse, Springsteen reafirmó sus críticas durante sus conciertos en Europa, defendiendo el derecho a la libertad de expresión y denunciando la persecución de voces disidentes en Estados Unidos. El músico agradeció a su público británico por escuchar su mensaje sobre la importancia de proteger la democracia y los derechos civiles.
La controversia ha generado reacciones diversas en el mundo del espectáculo y la política. Kid Rock, conocido simpatizante de Trump, calificó la actitud de Springsteen como una "jugada de cobarde" en redes sociales. Sin embargo, otros artistas han mostrado solidaridad con "The Boss". En Pittsburgh, la banda Pearl Jam rindió homenaje a Springsteen interpretando una de sus canciones durante su propio concierto, en señal de respaldo ante los ataques presidenciales.
Reacciones y clima de polarización
El enfrentamiento ha provocado un debate nacional sobre los límites de la libertad de expresión, el papel de las celebridades en la política y el uso del poder presidencial para silenciar a los críticos. Mientras algunos aliados de Trump consideran que las críticas de Springsteen "socavan a Estados Unidos", otros subrayan que el músico ha sido claro al dirigir sus palabras contra la administración y no contra el país en sí.
La industria musical y del entretenimiento, por su parte, ha reaccionado con preocupación ante la retórica de Trump, interpretando sus palabras y amenazas como intentos de intimidar y censurar a figuras públicas que ejercen su derecho a disentir.
La controversia sigue en desarrollo, con la mirada puesta en si la anunciada investigación avanza y en cómo responderán otros artistas ante lo que muchos consideran un ataque directo a la libertad de expresión en Estados Unidos.