Irán Aumenta la Enriquecimiento de Uranio en Fordow y Despierta Preocupación Internacional
La planta de enriquecimiento de combustible Fordow, una de las instalaciones nucleares más protegidas de Irán, está bajo creciente escrutinio internacional tras informes recientes que señalan un aumento significativo en los niveles de enriquecimiento de uranio. La Agencia Internacional de Energía Atómica (OIEA) ha confirmado que Irán ha incrementado la producción de uranio enriquecido hasta un 60% de pureza en Fordow, un nivel cercano al grado armamentístico y muy superior al 3-5% utilizado para la generación de energía eléctrica.
Fordow, situada a unos 30 kilómetros al noreste de Qom y construida a más de 150 metros bajo una montaña, alberga actualmente alrededor de 2,700 centrifugadoras, según datos de la OIEA. La agencia verificó el 28 de mayo de 2025 que Irán alimenta hasta 1,044 centrifugadoras IR-1 y 350 IR-6 en la instalación, lo que ha elevado la producción mensual de uranio enriquecido al 60% a más de 34 kilogramos en forma de hexafluoruro de uranio (UF6).
Este aumento de la capacidad de enriquecimiento se produjo tras la aprobación de una resolución liderada por países europeos en la Junta de Gobernadores del OIEA, lo que llevó a Irán a multiplicar por diez su capacidad de enriquecimiento en Fordow. Aunque la instalación ha sido objetivo de ataques recientes atribuidos a Israel, la OIEA ha confirmado que no se han registrado daños directos en la planta ni en el reactor de agua pesada de Khondab, actualmente en construcción.
La comunidad internacional, especialmente Israel y Estados Unidos, observa con preocupación la acumulación de uranio altamente enriquecido en Fordow. Expertos advierten que, con el stock actual, Irán podría convertir el uranio enriquecido al 60% en material apto para armas nucleares en cuestión de semanas, lo que sería suficiente para fabricar varias ojivas nucleares.
Irán sostiene que su programa nuclear tiene fines exclusivamente pacíficos y que, como firmante del Tratado de No Proliferación Nuclear, tiene derecho al uso de tecnología nuclear con fines civiles. Sin embargo, la OIEA y varios gobiernos occidentales consideran que la configuración y el nivel de enriquecimiento en Fordow son inconsistentes con un programa nuclear pacífico.
La situación sigue siendo monitoreada de cerca por la OIEA, que ha reiterado su preocupación por la falta de transparencia y el acceso limitado a las instalaciones desde 2021. Las tensiones en torno a Fordow mantienen en vilo a la comunidad internacional, ante el temor de una escalada que podría tener graves repercusiones para la seguridad nuclear global.